Si el pelo de las personas hablase, creo que muchas de nosotras iríamos con los oídos calentitos, porque con frecuencia escucharíamos cosas que no nos gustaría oír, ¿verdad?
Sí, es cierto que el pelo no habla, pero se acaba revelando contra nosotras. Algunas veces hasta se cabrea con los “juegos malabares” que hacemos con él. Se queda triste, sin brillo y hasta nos hace frente (¿quién no tiene o ha tenido una mañanita movida en la que el pelo NO se quedaba como queríamos?) ¿Ves que tiene vida propia?
Es cierto. A veces la cosa se pone fea, porque nuestro pelo tiene personalidad y no nos perdona tan fácilmente y claro, no nos ayuda en nada.
Nos quedamos locas buscando trucos, consejos, milagros que nos traigan de vuelta la alegría de vivir, a gusto con nuestro amado pelito.
En la época del colegio, cuando jovencitas, el pelo era virgen, tenía mucho brillo, crecía bien. Pero claro, antes o después y sin saber por qué nos aparecía ese espíritu de contradicción e insatisfacción propio de la edad y empezamos a querer probar cosas nuevas como las mechas... o dejarlo mojado con un moño estilo casual... Por si esto fuera poco nos empieza a apetecer tener un liso tabla y machacamos el pelo con la plancha sin ninguna piedad. Claro, como creemos que lo sabemos todo (pero no sabemos nada) pues no usamos protector de calor, no hidratamos.
Bueno, hay una excusa: éramos unas niñas... jaja.
Sin embargo ahora, ya creciditas, seguimos probando alguna que otra cosa en nuestro pelo, especialmente tintes y mechas. Sin contar que además algunos “artistas” se dedican en hacer sus prácticas en nuestro pelo...
Dejemos de una vez por todas los experimentos y cuidemos ya de nuestro pelo.
Mechas, tintes, alisados... Todo se puede hacer siempre y cuando seamos orientados por buenos profesionales y que les hagamos caso en sus consejos expertos... Claro, no vale hacer mechas y luego no hidratar cada cierto tiempo.
Vamos a hacer de este blog un lugar para aprender trucos, sugerencias de tratamientos para recuperar y también mantener el pelo lindo y saludable.
Una sugerencia para empezar:
No ates el pelo con una coleta mientras esté mojado o húmedo. La hebra del pelo se puede pudrir y romperse a la altura de la goma que lo sujeta.
Utiliza siempre champú con PH neutro, o 5.5 para que las cutículas no se abran y pierdan su propia queratina.
Al utilizar la plancha, utiliza protector de calor. Evita utilizar sérum de silicona porque a la larga, tu pelo se queda como “impermeable” y perderá el poder de absorber nutrientes de las mascarillas.
¡¡¡Chicas!!! Como décimos en Brasil: Preparémonos para ser “poderosas” y hagamos las paces con nuestro pelito. ¡¡¡Este blog es nuestro!!!!
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